El éxito y el fracaso no son lo mismo en el mundo laboral y económico que en especioso mundo del mole cultural.
En el mundo económico un fracaso se determina cuando un negocio no es competitivo, tiene bajas ventas, nadie lo conoce o a nadie le importa o no sirve para nada. En el medio cultural todo eso no surte el mismo efecto. Ya sabemos de antemano que aunque hay un esfuerzo por vender la obra, el acto, las ideas, artes, artesanías, y eso es bueno, ya sabemos que en la cultura no hay dinero. Pierde su tiempo quien cree que se hará rico, en términos económicos, desde la cultura.
En la cultura lo que importa es la reflexión, la visión grupal o individual, el ensueño, la estética, las voces, las ideas.
Dentro del amplio círculo cultural podemos leer una obra como la Ilíada escrita por un tal Homero hace 25 siglos...o un ensayo sobre la mexicanidad escrito en 1950 por Octavio Paz, el Laberinto de la Soledad. O bien podemos leer una noveleta underground mal escrita publicada en un blog como este hace un par de meses. ¿En donde queda la cuestión económica aquí? ¿Le preocupaba a Dante Alighieri el dinero o su poema La Divina Comedia publicado escrito hace siglos? No, él quería dejar su huella en la mente humana, aunque en estos tiempos a la gente ya casi no le gusta leer a los Clásicos, la obra ahí está. Prevalece en el tiempo. En la cultura no nos importa el tiempo. Se vive a su propio ritmo. ¿Quién mantiene el pulso cultural? La misma sociedad. Se va una y viene otra gente. La cultura no deja de producirse. Es incontrolable. Gobierno y empresas la intentan medir, cuantificar, hacerla un negocio, pero no se puede. La cultura es como una religión alterna que ayuda a la sociedad a darle un propósito en la vida comunitaria.
¿Cuántos artistas sufren el anonimato, el desprecio y la incomprensión por ejemplo Kafka, Pessoa, Vincent Van Gogh? Ahora podemos disfrutar de sus obras. Excepto Jesucristo, nadie es eterno. Pero la obra del artista prevalece. La cultura desconoce el paso del tiempo y los términos de producción, comercialización, fama y reconocimiento masivos.
El dinero y el poder se acaba, la vida es breve pero el arte prevalece.
Verdeth