jueves, 27 de mayo de 2021

EL SIN AMIGOS

Le decía a mi veintiúnico amigo en Ensenalgas que ya me quedé sin amigos. Ya no cuento con hombres ni mujeres que mi amistad les complazca o les deje algo bueno. 
Sé muy bien lo que a la gente le caga de mí y no lo pienso dejar. Les molesta que me tome muy en serio cosas que a ellos no les merecen tanta importancia: LA RELIGIÓN, LA VERDAD, LA FILOSOFÍA, la honradez, la honestidad. 
No pienso cambiar de parecer para ser agradable a los demás, ni que valieran la pena. Somos conocidos, somos civilizados, pero gente que no le agrado, que nunca me ha faltado, puede seguir lejos de mí. Y ya no los espero ni mucho menos los necesito. No les debo nada ni ellos a mi, ni siquiera un saludo. Bueno. He optado por disminuir mi consumo de grasas y azúcares. Y pese a todo, hay un Dios.