Me avergüenzo profundamente de ser artista. Lo digo sinceramente. Quienes me conocen pensarán que estoy fingiendo para tener algo de atención. ¿Aquí en blogspot o en facebook con mis tremendos 30 seguidores?
Ni al caso. De verdad me avergüenza mucho el haberme dedicado por mucho tiempo al arte. Muchos artistas deberían pensar como yo y así no habría tanta basura artística. ¿Y si nos retiramos por siempre? El arte es una pasión de juventud porque ya a cierta edad el artista es ridículo. Cómo Jodorowsky, como Alex Lora o los Rolling Stones que son patéticos y dañan el mundo del arte. Están robando aire. Está bien hacer siempre lo que nos gusta pero cuando la vida de artista da más grima que satisfacciones es tiempo ya de dejarla a un lado.
Alguna vez me dijeron que ya quisiera tener la energía de esos viejos artistas famosos a quienes crítico. Al menos yo soy hombre y no un esperpento satánico como estos que menciono.
El rock no porque es como una religión, un sentimiento de por vida y a la mayoría de rockeros no les importa el ridículo.
Sé que es peor ser un puto político que un artista. Un artista por muy fiera que sea sin un medio importante, sin presupuesto ni reconocimiento es inofensivo.
En cambio una rata en la política siempre es un estorbo institucional, merma, etc.
Cuento con los dedos de una mano los políticos que me caen bien. Igual con los artistas. La ventaja es que los artistas no nos cuestan tanto como los fundillos políticos.
Insisto: artistas que no la hacen, que no hacen su carrera económicamente viable, deberían de renunciar y dejar de dar lástima.
Si eres artista que le sale, que vive de sus creaciones, que por lo menos tiene reconocimiento de unos cuantos, adelante. Si no, renuncia como yo.
No pasa nada. El mundo ni te necesita y cuando no estés no te va a extrañar.
Verdeth