No tengo reconocimiento pero no lo necesito. Me basta con saber que soy el mejor pinche monero, no sé si de México, y no me importa, pero los que conozco todos me la pelan. Puedo dibujarme como se me venga en gana, en la situación que quiera, como realidad o ficción, estoy seguro que no hay un mejor monero que yo.
Hay mejores escritores que yo, mejores músicos, mejores raperos, mejores amantes, mejores personas, mejores intelectuales, mejores filósofos, mejores fumadores de mariguana, mejores bebedores de vino, gente más talentosa en general pero mejores moneros que yo, no conozco. No tendría empacho en reconocer que hay mejores moneros que yo. Soy mejor monero que cualquier monero chairo capitalino, valga la redundancia. Y además yo no estoy en venta. Mis monos son los mejores, los más brutales.
Lo digo sin vanidad ni pretensión, soy el mejor y lo seguiré siendo. Desde Tijuana para todo el país, monos es lo único que he hecho.