jueves, 18 de agosto de 2022

LOS COCINEROS NO SON ARTISTAS

En México los cocineros se creen rockstars y los creativos lavamos platos.
Como se creen tanto y en todos lados los croman, la gente simple los encasilla en las artes y existen las artes culinarias pero los chefs mexicanos famosos se creen demasiado algo que no son y por lo que nunca tuvieron vocación: EL ARTE.
No en un sentido culinario, en forma, estilo o tradición. Estos güeyes ya que son famosos se creen ahora sí artistas ya con tiempo, dinero y fama. También fama de mamonazos como el gordo ese que tenemos en la imagen. Yo le compré su personaje de duro juez cocinero en el show masterchafa (masterchef) un programa pedorro de concursos de cocina en donde ese sujeto que hacía sufrir a los concursantes con sus exigencias. Pero lo ves y lo escuchas en realidad, sin censura y tal como es y es un barbaján caideamadre de educación primaria trunca. Corriente, bravero y sobretodo pretencioso ya que el gordo es abiertamente satánico. Ya con eso yo no comería nada que hiciera ese imbañable. Y no escribe mal, ha publicado algunos libracos y artículos de sus mamadencias. Pero ni así es un artista. Es un cocinero famoso y ya.

Pero aunque un cocinero sea famosísimo, que adorne sus platos, que salga aquí y allá, diga esto y el otro, escriba libros, es sólo un pinche cocinero; nunca un artista. No van a entrar los cocineros de contrabando al mundo del arte. Me da gusto que a la gente le vaya bien con sus empresas pero me caga que una persona se sienta artista cuando no lo es. Entiendo que debe ser por la fama que hace perder el piso a casi todos que se creen lo que a todas luces no son: artistas.

Yo sé cocinar para mí. Ahora sí que No necesito de bules para nadar. Pero mis conocimientos de cocina no me dan para autocalificarme de cocinero, ni de pinche y mucho menos de chef. ¿Por qué los cocineros se creen artistas, sólo por salir en tv o en tiktok? A unos les toca cocinar y a otros comer. Los cocineros alimentan el estómago, los artistas alimentamos el espíritu.

El arte llega al espíritu humano, lo toca, lo transforma, lo inspira. El "arte" de un cocinero siempre acaba en un escusado. 

Y si quieres saber  de arte, pregúntame.

Verdeth