lunes, 15 de marzo de 2021

POLITICA

No me parece muy atinada la comparación de los políticos con títeres pues ya no estamos en el siglo 19. Ahora es mejor definirlos como robots de carne y hueso. Autómatas sin personalidad, sin ideales, sin moral, obedientes, apegados a sus mentiras, programados masónicamente como anticristos, de izquierda o derecha, para ejecutar órdenes y firmar pactos en la oscuridad, que rebuzne y estorbe a la verdad y la luz. Todos harán lo mismo, no habrá uno solo distinto. Así funciona la política en todo el mundo.