Sexo pandémico por todo un año. La mayoría se adaptó a coger como subnormales en la fraudemia. Culear pues no hubo, no hay, no habrá mucho por hacer.
Para muchos echar pata es lo máximo. Para mí lo mínimo. Nadie quiere coger conmigo y yo no pienso mover un dedo para lograrlo.
Vivo de mis viejas hazañas sexuales. Bueno ¿pero a quien puede importarle la vida sexual de los demás?
Cualquiera culea. La diferencia la haremos quienes vamos solos por la puta vida y sin depender del afecto de los demás. Sólo son culos, humores, gemidos, placeres fugaces.