viernes, 1 de septiembre de 2023

BIG FASHION ES EL SHOW DE JACKASS PERO CON GORDOS Y MUCHA COMIDA

¿Alguien recuerda el show Jackass de la cadena de MTV que causó revuelo mundial a principios del milenio? Eran un grupo de gringos un tanto homosexual que hacían bromas pesadas, acrobacias con patinetas y bicicletas, bromas, chistes y burlas insanas de ellos mismos? 
Pues algo así como quien dice dice viene siendo Big Fashion, un canal de Youtube con regiomontanos (Monterrey N.L.) sumamente obesos que se la pasan visitando puestos de comida callejera y restaurantes de Monterrey y otras ciudades donde pueden viajar por vía terrestre ya que se les dificulta mucho viajar en aviones. No se sabe si es porque no caben en los asientos o porque el todo el avión peligra con semejante cargamento o porque se les sube la presión pero el caso es que los gordos regiomontanos (el más delgado pesa más de 100 kilos) son ya muy famosos y la gente los quiere mucho aunque ese amor que les profesan nunca se preocupa de la salud del elenco, ellos son sencillos y se toman fotos con todo aquel que se lo pida. 
Las acrobacias de estos jóvenes y simpáticos gorditos consiste en ver quién come más y de todo. Aunque tienen muy distintas personalidades la constante entre ellos es la de comerse todo lo que les pongan enfrente y mofarse de su condición de gordos pero famosos. Comen como si no hubiera un mañana, cosa seria, cosa del diablo.
Nada les importa más a esos gorditos que comer sus diez o quince veces al día y demasiado en cantidad.
En Jackass las cosas que hacían tanto para el programa como en sus películas buscaban el chiste fácil, la caída, el pastelazo, la autocomplacencia gay, la broma escatológica en cada una de sus entregas.
Al igual que JACKASS, Big Fashion también tiene a un enano pero gordo.
En Big Fashion hay sentido del humor pero también mucho sentido del dolor y el sufrimiento. Porque, seamos sinceros, nadie puede andar por la vida muy campante teniendo varios días sin cagar.

Nadie puede estar feliz de cargar 100 o 150 kilos extras al peso corporal. A pesar de estar jóvenes, sus rodillas han de gemir, sus tobillos crugir, su espalda ha de suplicar. 
Una cosa es tener unos kilos de más, cosa que en edad avanzada es un gran problema, y otra muy distinta la autodestrucción, el suicidio con tenedor y cuchillo de cada bocado de esas comilonas que nuestros queridos y simpáticos gorditos del canal Big Fashion se dan a diario.
Muchos los quieren por su insana alegría de tragar como si la comida fuera a acabarse pero pocos los ayudan o asesoran. 
Qué bien que les vaya excelente en lo económico, que aprovechen su fama para hacer negocios pero su salud va en detrimento por esa manera de comer.

Recientemente un gordo de Big Fashion  se casó, el tal Luisito quizás el más gordo del equipo comelón. 
Cuando una parejita se casa por amor es de lo más bonito que hay en la vida.
Pues ese día, que hicieron video de la boda, se veía a un Luisito feliz a duras penas entrando en el traje de novio, un traje que es de la misma cantidad de tela que cuatro trajes de tallas regulares. El gordo todo sudado sólo por dar unos pasos y lo que más pena y preocupación me dio, hablando siempre humanamente, fue su pobre mujer en la noche de bodas.

Digo, ella ya sabe a lo que le tira ¿no? echarse encima esa mole de carne para consumar el matrimonio debió ser heróico. Pero pobre mujer. No creo que Luisito se haya...no. El amor siempre buscará la manera, supongo. 

Los videos siguen corriendo y teniendo gran éxito. En un video ya se atrancan con tacos de asada, en otros con carnitas de puerco, pozoles, menudos, birrias, barbacoas, mariscos, invaden panaderías y cafeterías, sushis, pizzas, hotdogs, tortas, hamburguesas, tamales, cabritos; todo de todo le entran estos pantagruelicos regiomontanos. 
Muchos los ven venir desde lejos y se van corriendo como en las películas de Godzilla cuando llega a destruir la ciudad de Tokio porque además de anchos como la chingada, y mira que la chingada es muy ancha, también son muy altos. 

Tanto que si hay un día soleado en Monterrey o en cualquier lugar, al llegar los gordos de Big Fashion todo se oscurece. Y los cocineros tiemblan. Y los restaurantes de buffet los odian pues estos gordos no entienden el concepto de servirce comida de diferentes estilos precisamente para no estar pidiendo una y otra cosa. No, estos gorditos abominables creen que el concepto de buffet es comer todo lo que quieran y puedan. Y el problema es que pueden y quieren comer mucho siempre.
Arruinan al restaurante. Dejan pura ensalada, porque eso no les gusta. La comida sin miles de calorías no les mama.

En fin, yo creo que por su juventud es que estos gordos siguen ahí tan campantes. Pero la mala salud es evidente y no falta mucho para que les comience a pasar la factura de todas las que deben y de haber engordado tan groseramente. 
Demasiada libertad es perjudicial. No pueden comer todo lo que se les antoje todo el tiempo, gordos. Porque nunca es en su caso un apetito natural. Se trata ya de un problema emocional, carencia afectiva de los padres o carencia y sentido espiritual de la vida.
O puedes ser algo hasta demoníaco, una infelicidad que los hace atentar contra su propia vida a veces de una forma subconsciente. 
Es un huecote, un gran vacío emocional y afectivo que quieren rellenar con comida. A ustedes les falta Dios. Él los espera todo el tiempo, vayan con Dios. 

Tienen todo: fama, dinero, familia, casa, muchísima comida; ya sólo les falta Dios y conocer la plenitud y ya no autodestruirse con la comida que se meten que es como una droga mortal. 

Por cierto ya están para ese otro reality show llamado Kilos Mortales en donde someten a dietas y operaciones de banda gástrica a personas con obesidad mórbida. Algunos de los pacientes mueren pero muchos otros recuperan gran parte de la calidad de vida aunque anden como globos desinflados. Mejor que parecer un tinaco Rotoplas y no caber en ningún lado. 
La vida ya de por sí es corta, estos gordos sin Dios han decidido vivir demasiado pronto. Triste su caso pues creen que sus reproducciones en youtube y tiktok son porque le agradan a la gente y no por el morbo que generan personas en esa condición que ya es un tema de salud pública pues México es el segundo país más obeso del mundo, superado sólo por los gringos. 
Es cuanto. Me despido con un consejo para todos:
Hay que ir al baño más seguido.

Adiós